Los barcos mormones navegaban por los Acantilados de Pedernal para luego rodear el cabo de las águilas y directamente hacia Varamar para posteriormente lanzar un ataque hacia Harlow. Dante había pensado mucho en eso, la flota del hierro debería haberse dividido, pues el trono de hierro no se quedaría quieto ante el ataque y enviaran a la flota real, eso haría él.
Su flota, aunque pequeña, tenía los mejores barcos que podía haber, el espolón era de acero y estaba especialmente reforzado en la parte frontal para para chocar otros barcos para destruirlos, una táctica que fue usada por Temístocles durante la guerra contra los persas.
Paso alrededor de una semana hasta que ser acercaron lo suficiente a Varamar y que espectáculo, fue, una fuerza naval de 40 barcos asediaba las costas de Varamar, acampando en sus costas.
—— ¡Mis hermanos, tranquilicen su corazón, miren al fonde de su alma pues su temple será probado este día y si en el calor del combate necesitan una razón para seguir peleando, una idea, por la cual ofrecer todo lo que poseen solo tienen que ver al hombre que lucha a su lado, ese es el por qué, de la batalla, esta es la hermandad de hombres en armas, un lazo inquebrantable fortalecido por el fragor del combate, con nadie estarán mas unidos que con quien derramen su sangre, pues no hay causa mas grande que luchar por aquellos que darán la vida por ustedes, asique hoy luchen con todo, luchen por sus hermanos, luchen por sus familias, pero ante todo luchen por Bear Island! —— dijo Dante sacando su espada de su cintura y señalando a las hueste Greyjoy que al ver un armada acercarse desanclaron y trataron de detenerlos, pero en esos momentos no estaban tratando de capturar ningún barco por lo que las ballestas lanzaron sus barrillas de metal con una potencia que ninguna embarcación había visto.
La madera voló por los aires y cuando vieron que los barcos se estaban hundiendo en el mar regresaron de inmediato a las costas para reagruparse con sus compatriotas que invadían los muros de Varamar, los mormones anclaron rápidamente en las costas, desplegando sus escuadrones en falanges que no dejaban aberturas a ningún ataque. Los nacidos del hierro que se quedaron atrás supieron que pasaba cuando te enfrentaba a un ejército, bien entrenado, disciplinado y superior.
Las pocas huestes del hierro que habían cuidado la bahía murieron miserablemente sin que ninguno mormón muriera, los ojos de Dante estaban fríos mientras observaba el paisaje, hombres muertos regados por toda la playa tiñendo la arena de carmesí y nacidos del hierro con ojos de terror, como si lo ultimo que hubieran visto fuera el más terrorífico monstruo, tal vez lo eran, después de todo un ejército disciplinado era el terror de uno que solo se lanzaba hacia la batalla.
—— Limpien el lugar y arrojen los cuerpos al agua, monten el campamento, mientras 700 hombres me acompañan a los muros Varamar para matar a los que deben estar asedian la ciudad —— dijo Dante mientras se montaba en Titan, el oso podía cargar a joven con facilidad aun con la armadura de batalla puesta. Su marcha duro media hora, pero cuando llegaron y vieron el asedio a Varamar Dante dio un rugido mientras cargaba al frente de sus tropas.
Los nacidos de hierro completamente concentrados en el asedio de la fortaleza se sorprendieron cuando por la parte trasera de su ataque se escucharon pasos pesados y mar verde se vio con un enorme oso blanco acorazado cargando en la parte del frente, Rodrik Greyjoy actuando rápidamente dio la orden de dividir sus fuerzas pero cuando el oso llego todo el infierno se desato, Dante en la parte de arriba mataba con una lanza con rápidos movimientos y cuando los mormones llegaron empezaron a destrozar a los piratas glorificados, la fuerza superior de los mormones se mostró porque ahí donde mataban a un mormón estos ya habían matado a mas de 10 nacidos del hierro.
[Jason Mallister Pov]
Los nacidos del hierro habían acosado la fortaleza por un tiempo pero no podrían pasar la puerta o las murallas, pero no quería que se convirtiera en una guerra de degaste, por lo que estábamos a punto de abrir las puertas y demostrar el poderío de mi casa, solo que no nos dio tiempo porque una ayuda inesperada llego, los estandartes del oso de la casa Mormont se mostraban mientras corrían con una fuerza que había temblar el suelo, los 2,000 nacidos del hierro que acosaban sus fuerzas se dieron la vuelta y supe que era el momento adecuado.
—— ¡Abran las puertas y que cada hombre se prepare, terminaremos esta batalla hoy mismo! —— grite desde lo alto del muro, sus soldados empezaron a prepararse, pero el espectáculo que siguió a la colisión del oso fue un espectáculo, el hombre sobre el oso estaba matando con una eficiencia que solo era superada por la criatura que montaba.
No tardamos mucho en agruparnos y abrir las puertas para arrinconar a los nacidos del hierro que pronto tuvieron que dividir sus fuerzas entre la parte frontal y trasera donde los mormones atacaban con fiereza, los habíamos rodeado.
—— ¡Al ataque! —— grite con fuerza mientras cargaba sobre mi corcel a la batalla, haría pagar a estos salvajes por la audacia de invadir mi hogar.
[...]
Bajando de un salto de Titan, Dante tomo una flecha para ponerla en su arco y matar al primer nacido de hierro que estaba enfrente suyo, tomando otra repitió lo que hiso, sus sentidos estaban enfocados en la batalla mientras disparaba flecha tras flecha matando a todo el que osara acercarse, no tenia de que preocuparse si titan le cubría las espaldas, dicho oso estaba matando calamares con su asombrosa fuerza, así como las garras afiladas de sus patas y poderosas mandíbulas llenas de afilados dientes.
Un nacido del hierro se acerco para su disgusto y cuando trato de tomar otra flecha se encontró que ya no tenia ninguna en su carcaj, descartando el arco tomo a garra con una mano para bloquear la espada de su enemigo para luego con su escudo golpearlo en el pecho lo cual a falta de armadura hiso que este sintiera toda la fuerza del golpe, el filo de su espada se encontró con la garganta de su adversario, pero no se detuvo ahí.
Avanzando con Titan rugiendo a su espalda, se apresuró al siguiente enemigo en trance, sus ojos captaron todo mientras bloqueaba una espada su escudo y en un simple balanceo de garra corto el brazo del hombre que ni siquiera pudo gritar cuando titan lo aplasto para seguir a su maestro que avanzaba como un demonio, en algún momento llego al centro de la lucha donde un hombre con armadura negra con el escudo de los Kraken adornando el peto, sus ojos se cruzaron y por la furia en sus ojos sabía que le habían reconocido, o al menos su blasón siento que el mismo llevaba el símbolo de su estandarte en el pecho.
Sin miedo empezó a correr al hombre que tomo una lanza para lanzársela la cual fue parada por su escudo el cual descarto después de que el arma quedara incrustado, el hombre levanto otra lanza y la aventó con todas su furia pero Dante al verla la esquivo fácilmente para estar más cerca de su objetivo, al estar cerca el hombre desenvaino su espada la cual balanceo pero con un salto alto y una perfecto tiempo el Mormont lo evadió para incrustar en el cuello del hombre la punta de Garra la cual retiro de inmediato.
Caminando lentamente hasta detenerse y con el pecho agitado observo al hombre caer muerto, los soldados Greyjoy vacilaron al ver al heredero de las islas del hierro muerto, ese momento fue suficiente para que fueran aniquilados por los mormones que apenas vieron una abertura mataron a todo aquel nacido del hierro que se les atravesó.
—— ¡Sin prisioneros! —— grito Dante mientras cortaba a otro nacido de hierro y bloqueaba una flecha con un escudo que había recogido del suelo. Titan soltó un poderoso rugido de guerra mientras procedía a destrozar a cualquiera que se acercara a su señor. El tiempo paso y a pesar de que muchos se rindieron ese día no hubo ningún sobreviviente.
—— ¡Victoria! —— grito Dante bañado en sangre mientras a sus pies decenas de muertos se extendía, su enorme montura rujío con el resto del ejercito que celebro la primera victoria sobre los Greyjoy.
[...]
—— Lord Mormont lo saludo y le doy las gracias por su ayuda en un momento tan desesperado —— saludo Jason Mallister a Dante cuando este entro por las puertas abiertas de Varamar el chico caminaba a lado de su montura que parecía más intimidante con su pelaje rojo y sus mandíbulas escurriendo gotas de sangre.
—— Lord Mallister es bueno a ver llegado a tiempo —— dijo Dante ofreciéndole una mano que el hombre acepto, ambos estrecharon sus manos y se sonrieron para luego empezar a conversar, pues a pesar de que el Mormont era joven su valor en el campo de batalla ya había sido probado.
—— Habrá un gran banquete para celebrar esta gran victoria, sus soldados son bienvenidos —— dijo Jason Mallister sonriendo mientras se levantaba, pero al ver al Joven Mormont mirarlo seriamente supo que algo no iría bien o no era como lo había planeado.
—— Aprecio el gesto Lord Mallister pero me temo que con la guerra en curso las celebraciones aún son muy tempranas, tengo intenciones de invadir Harlow para que la flota real tenga puerto seguro para desembarcar —— dijo Dante mirando seriamente al señor de Varamar que miro al chico como si estuviera loco, eso era una misión suicida.
—— Eso es una locura, si vas no solo tendrás a todas las huestes Greyjoy, solo encontraras tu muerte muchacho —— dijo el hombre mayor guían a Dante a las recamaras privadas para poder hablar como lores sin que nadie mas los viera.
—— Entiendo sus preocupaciones Lord Malllister pero ya he dado mi palabra a Lord Stark y no pienso retractarme. Mi honor esta en juego y pienso arrasar Harlow, devolverles a los nacidos del hierro lo que le han hecho a mi pueblo durante cientos de años —— dijo Dante mirando con determinación feroz a el señor de Varamar, que miro al joven frente a el con asombro antes de suspirar y negar con la cabeza.
—— No puedo brindarte soldados, pero llenare tus barcos de comida, suficiente para medio año, te deseo suerte en tu cruzada joven oso —— dijo Lord Mallister ofreciéndole su mano en saludo al joven que tenia enfrente, no, al guerrero frente a él.
—— Estaré en la bahía con mis hombres, partiremos a la mañana siguiente, podría ir y podremos brindar, puede no ser banquete que quería, pero sin duda brindaremos y honraremos a los caídos —— dijo Dante despidiéndose del señor de Varamar, tenia cosas que hacer.
Cuando salió de la fortaleza que tenía las puertas abiertas Dante escucho las alabanzas, el júbilo de la ciudad que veían a un héroe que llego en su rescate. Al acercarse a sus soldados que ya estaban saqueando los cuerpos de los Greyjoy estos al ver a su señor todos se pusieron de pie con lanza en mano y escudos alzados.
—— ¡Recojan el botín y llévenlo a los barcos, zarparemos al amanecer, esta es la primera victoria de muchas, enorgullézcase, hoy hicimos historia! —— grito Dante y sus soldados dieron un rugido con fuerza, todos orgullosos de lo que habían logrado, hasta hace poco los hombres de la isla del oso no eran mas hombres barbaros, ese día eran soldados forjados por el calor de la batalla.
—— Mi señor, esto le pertenece, usted lo mato —— dijo un soldado mientras le ofrecía la armadura que era el heredero de las islas del hierro, pensó que de hecho era miembro de la familia gobernante pero no pensó que ese viejo fuera tan estúpido para mandar a su propio hijo. Tomando la armadura y la espada del anterior heredero de la isla los miro, eran normales, pero era lo que representaba lo que hacia valioso.
[...]
En las costas de Varamar las carpas estaban armadas, pero solo era temporales, pero el evento importante eran las piras, troncos formados de manera que cada mormón caído en batalla tuviera una propia, perdió 103 hombres, buenos hombres que estaban dando su vida por una guerra que ni siquiera ellos la empezaron, una guerra que no tenia nada que ver con ello, por su mandato.
—— Que sus familias reciban sus armaduras, enviare un barco con sus cosas para que sus hijos, hermanos o primos puedan heredarlo, ¡que quede claro, al final de esta larga guerra serán recompensados, el botín que consigan es suyo, a los caídos en batalla sus familias serán recompensadas, no abandonare a mi gente! —— grito Dante para regocijo de sus soldados los cuales estaban legres con las noticias ya que los señores usualmente se adueñaban del botín pero su lord solo pedía los barcos los cuales aun que los consiguieran no podrían manejarlos.
Después de las ceremonias de cremación se celebro un pequeño festejo para todos los soldados los cuales tenían prohibido emborracharse pues zarparían a la mañana siguiente. En una mesa con comida y bebida se encontraban ahí para que los Lores lo probaran, pero Lord Jason se ahogó un poco con el Whisky.
—— *tos *tos ¿Qué clase de bebida es esta? —— pregunto Lord Jason con la voz ronca, Dante le dijo el nombre de la bebida regalando una botella e informando que podría comprarlo en la isla del oso. Con eso en mente festejaron tranquilamente, la paz antes de la tormenta.
[...]