Capítulo 14 Diosa Ancestral
Un año después, los clones utilizaron la omnisciencia para
mapear todo el reino de los dioses y crear una red de distribución de su poder.
Con esto, Xión conectó su mente con sus tres millones de clones distribuidos
por todo el reino divino.
Estaba sentado en un trono Asgard, en la sala de un palacio
mientras sus esposas, prometidas e hijas lo observaban. Estaban Jasmine,
Caizhi, a quien Jasmine había prometido con él, Chu Yuechan, Huan Caiyi y su
pequeña hija de dos años, que ya era la heredera del reino demonio ilusorio.
También estaban Feng Xuer'er, Mu Xuanyin, Mu Biyun, Chi Wuyao y sus nueve
brujas, e incluso Shen Xi, a quien había liberado de su sello. Xión se preguntó
si las cosas se le habían salido un poco de control en este mundo.
—¿Hay algún problema? —preguntó Jasmine con preocupación. Xión
negó con la cabeza.
—No, todo está bien. Los clones están en posición, comenzaré
ahora —dijo Xión.
—Vigilaremos por ti —dijo Huan Caiyi, mientras le hacía
algunos pucheros a su hija. Xión asintió y cerró los ojos.
Para reparar la realidad, Xión utilizó su habilidad de
manipulación de la realidad, la creación de todas las cosas, para reparar la
erosión y las leyes rotas. Estas leyes no eran más que aplicaciones de la realidad
que regían cada universo y que eran diferentes en cada uno de ellos, lo que
llevaba a la existencia de diferentes materiales en cada universo. Por lo
tanto, Xión no podía simplemente usar su poder para arreglarlo según su
conocimiento previo. Debía reparar la realidad de acuerdo con las reglas de
este universo y teniendo en cuenta sus energías dominantes para no romper su
equilibrio. En este mundo, la energía dominante era la llamada "energía del
cielo y la tierra", una energía que los seres vivos podían utilizar
directamente y que daba origen a los cultivadores. Era lo más parecido al
chakra que Xión había encontrado, aunque el chakra seguía siendo mil veces más
fácil de moldear y usar, y no requería técnicas de cultivo.
Xión influyó en la realidad y redujo el efecto de las leyes
de la nada, que era una destrucción o erosión natural del universo, pero que,
al estar desequilibrada, afectaba al resto de la realidad.
Mientras Xión reparaba la realidad en el mundo de los dioses,
los cultivadores en el reino divino del Maestro, que estaban en rango diez,
sintieron los cambios y los más avanzados entre ellos sintieron la llamada de
la divinidad. Incluso sus propias esposas, que estaban al borde de avanzar
hacia el nivel de dios, o lo que ellos conocían como dios, también lo sintieron
y cerraron los ojos. Aun así, Xión continuó con su tarea durante otra semana,
hasta que las leyes se volvieron tan fuertes que incluso comenzaron a
restringirlo a él.
Xión abrió los ojos y les sonrió.
—Esposas, es el momento de convertirnos en dioses verdaderos
—dijo Xión con una sonrisa.
Mientras Xión hablaba, dos clones llegaron con las dos
semillas restantes: la semilla de tierra, que limitaba la destrucción de la
realidad y se encontraba en el vacío de la nada, y la semilla de viento, que
estaba en la región norte del reino de los dioses, donde antes dominaban los
dioses diablos.
Los clones hicieron flotar las semillas heréticas hasta él y Xión
las tragó. Luego cerró los ojos y utilizó la energía del Orbe Oscuro para
avanzar en su propio cultivo, pasando de rango en rango sin descanso, en menos
de un minuto, desde la etapa de Rey del Reino Divino hasta la etapa de Soberano
y luego a la etapa de Maestro Divino, sin encontrar ningún obstáculo. Así se
convirtió en el primer semidiós del Reino Divino desde el final de la guerra de
los dioses hace cinco millones de años.
Según la historia original, este reino de cultivo era un
medio paso para convertirse en un dios verdadero, pero a los ojos de Xión, su
poder actual estaba lejos de ser considerado un dios verdadero.
…
Xión abrió los ojos y miró a sus esposas, prometidas e hijas.
Las observó sin ocultar su aura, con las siete puertas abiertas, lo que
significaba que su poder estaba liberado, aunque contenido en su cuerpo. Aun
así, ellas podían sentirlo.
—Acérquense, modificaré sus venas profundas para que puedan
utilizar las artes secretas del dios maligno y las semillas heréticas. Luego
avanzaremos juntos —dijo Xión.
—¿Puedes copiar el legado del dios maligno? —preguntó Jasmine
asombrada. Xión levantó una mano y creó una gota de sangre, que representaba el
legado del dios maligno.
—Soy un verdadero dios, el dios maligno solo era un semidiós.
No podía alterar la realidad más allá de un diez por ciento, pero una vez
asimilé su legado, no hay problema en imitar lo que él hacía. En cuanto a por
qué quiero hacer estas mejoras en ustedes, es porque he encontrado un recurso
de cultivo de rango dios de la creación. Aunque podría adaptarlo para ustedes,
eso me llevaría años, así que es mejor simplemente modificar sus venas
profundas para que puedan usarlo —explicó Xión.
—El orbe oscuro del dios diablo —dijo Jasmine, recordando
cómo el Emperador Diablo lo había plantado en él para tratar de matarlo, pero
las venas profundas del dios maligno y la semilla de oscuridad lo convirtieron
en parte de él. Xión asintió.
—Necesitarán la semilla de oscuridad para controlar este
orbe. Además, las ventajas de las artes secretas del dios maligno serán enormes
para ustedes —explicó Xión.
—Entonces, empecemos —dijo Chi Wuyao, y sus brujas asintieron
apresuradamente en señal de apoyo.
—Cuñado, esta hermana mayor oscura es demasiado ambiciosa.
Sería mejor que tomes a mi hermana primero —dijo Caizhi con una doble
intención, y Jasmine se ruborizó.
—¡Caizhi! —reprendió Jasmine.
Xión rodó los ojos y un clon suyo apareció al lado de cada
una de sus prometidas.
—Ellos las ayudarán en su avance —dijo Xión. Él había
convertido la energía de las fuentes FED 2.0, en energía del cielo y la tierra,
almacenándola en los orbes de oscuridad, por lo que tenía recursos suficientes
para todas, y no necesitaban hacer fila.
…
Con el orbe del origen del diablo, Xión no tuvo problemas
para atravesar el reino de la extinción divina y el reino del dios verdadero y
llegar al reino del dios de la creación. Sin embargo, al llegar a esta etapa,
su progreso se detuvo, ya ese era el límite del orbe del origen del diablo.
Podía intentar avanzar por su cuenta, pero eso le llevaría años y no era
necesario, ya que aún tenía una guía que podía usar.
…
Después de pensarlo, cinco días después de comenzar su
avance, Xión abrió los ojos estando en el pico del reino del dios de la
creación, luciendo una sonrisa maligna.
—¿Qué… qué planeas? —preguntó Jasmine con aprensión. Xión
parpadeó y miró a Jasmine, quien apareció sentada sobre sus piernas. Él la
besó.
—Querida esposa, tienes una opinión muy baja de tu esposo
—dijo Xión abrazándola y besándola. Jasmine se avergonzó y también lo
reprendió, pero Xión no la soltó.
—Queridas esposas —dijo Xión mientras sus clones desaparecían
y tomaba a Honger y a Ni Jie para sentarlas junto a Jasmine—. Me llevará algo
de tiempo reunir las cosas que necesito para avanzar y también terminar de
reparar la realidad y expandirla un poco más —dijo Xión, sabiendo que con su
poder actual no sería un problema.
—Entonces podemos ocuparnos de nuestros propios asuntos
—sentenció Jasmine. Xión suspiró y asintió.
—¿Podrías, por favor, dejar de lado el reino de la luna? La
chica sin moral está allí y prometí ayudarla —dijo Xión. Jasmine frunció el
ceño pero asintió.
—No dejaré ir a Qianye Ying'er —dijo Jasmine. Esa mujer
merecía cualquier castigo, por lo que Xión encogió los hombros. Él ni siquiera
había visto a la diosa dorada a pesar de haber recibido varias invitaciones de
su parte, y aunque el emperador Brahma había estado acechándolo, Xión sabía que
Qianye Ying'er no era bienvenida para Jasmine, así que se alejó de ella.
Qianye Ying'er fue responsable de la muerte del Sim del
hermano de Jasmine, a quien sonrió antes de enviarlo a la muerte con total
indiferencia…
—¿Deberíamos traer la Estrella Polar Azul al reino divino?
—preguntó Huan Caiyi. Xión asintió, ya no había peligro en eso, ya que ahora
tenían suficiente poder para proteger sus mundos.
—Te ayudaremos —dijo Chu Yuechan, mirando a Feng Yuer'er.
—Crearé un territorio para los espíritus del bosque —dijo
Shen Xi. Los espíritus del bosque eran la raza de He Lin y eran perseguidos por
los diferentes reinos debido a que sus núcleos podían ser utilizados para
avanzar en los niveles de cultivo.
—Volveremos a la región del norte y compartiremos la técnica
de cultivo del antiguo diablo para estabilizar los cultivos de todos y
permitirles abandonar la región norte —dijo Chi Wuyao. Xión asintió, ya que eso
era algo importante.
Los cultivadores de la energía elemental oscura no podían
abandonar la región del divina del norte debido a que sus cultivos se
desestabilizaban, pero con la ayuda de Chi Wuyao, ahora podían participar
plenamente en la vida del reino divino.
—Te ayudaré —dijo Mu Xuanyin con indiferencia. Xión fingió no
darse cuenta. Al principio, Mu Xuanyin parecía odiar a Chi Wuyao, pero cada día
se estaban volviendo más amigas.
—Hermana, yo volveré a la Canción de Nieve —dijo Mu Binyun.
Así, sus esposas y prometidas se fueron a resolver sus
propios asuntos. Las únicas que vinieron con él fueron Ni Jie y Honger, quienes
tenían un palacio en la Perla del Cielo y no les importaba mucho lo que
sucediera en el mundo. Cuando cada uno se fue por su lado, con poder absoluto
para hacer y deshacer en este mundo, Xión también decidió ocuparse de sus
propios asuntos.
…
En primer lugar, Xión dio un paso y apareció junto a la chica
de baja moral que se atrevió a chantajearlo.
Xia Qingyue lo miró, al igual que las tres sirvientas que le
estaban peinando el cabello, y gritaron pidiendo ayuda. Xión las observó y
todas cayeron desmayadas al suelo.
—Qingyue, vamos con tu madre —dijo Xión y ambos se dirigieron
hacia un jardín bajo un cielo puro y un aire curativo y lleno de energía
divina. Frente a ellos, se encontraba una mujer, no tan hermosa como Xia
Qingyue pero con rasgos similares. La mujer abrió mucho los ojos al verlo.
—Madre, este es Xión, él es un médico divino y puede curarte.
También es mi esposo —dijo Xia Qingyue, bajando la cabeza avergonzada. Xión
parpadeó.
—¡Esposo! Nada de eso, Qingyue. Recuerda que me pediste el
divorcio y no soy alguien que retenga a una mujer —dijo Xión, sacando su
contrato de matrimonio y entregándoselo. La madre de Xia Qingyue los miraba sin
haberse recuperado del asombro, pero Xia Qingyue parpadeó.
—Pero… pero tú me… —Xia Qingyue se mordió los labios y no
pudo decir nada. Cualquiera diría que Xión le había hecho algo terrible.
Esta vez fue Xión quien parpadeó. Lo más que había hecho con
esta mujer de baja moral que lo había chantajeado, poniendo en riesgo su propia
vida, fue darle algunas nalgadas y hacerla disculparse de manera apropiada. Sin
embargo, ella en ningún momento se disculpó ni actuó con sinceridad, solo
mostró hipocresía para que él curara a su madre. Además, no se arrepentía de
sus actos y no veía nada malo en chantajearlo. De hecho, si hubiera podido, lo
habría arrastrado con ella.
Con el comentario que hizo Xia Qingyue, su madre se recuperó
de su aturdimiento y lo miró con furia.
—¡Usted ha abusado de Qingyue! —reprendió la madre de Xia
Qingyue. Xión la miró.
—Señora, su hija intentó matarme. Solo le di unas cuantas
nalgadas y puede que la haya reprendido un poco, pero si no se ha dado cuenta,
la moral de esta mujer es muy baja y siempre está tramando planes oscuros. Si
no fuera por su belleza y la consideración que le tengo, nuestra relación
habría terminado hace mucho tiempo —dijo Xión y extendió la mano para tocar la
cabeza de Yue Guya y curarla. Ahora que era un dios, eso era un juego de niños.
Luego miró a Xia Qingyue, quien no había asumido su papel en el matrimonio.
—Xión, no romperé nuestro matrimonio, te amo —dijo Xia
Qingyue con un tono firme, y Xión parpadeó. "Amor, mi culo", pensó Xión con
repulsión, ya que podía sentir los verdaderos sentimientos de Xia Qingyue y
sabía que ella solo estaba calculando. Él la miró con ira.
—Qingyue, puedo sentir tus verdaderos sentimientos en todo
momento, así que puedes abstenerte de decir tonterías —reprendió Xión. Xia
Qingyue frunció el ceño.
—Entonces, eso es todo —dijo con voz apática. Xión asintió.
—Así es, fingir no te servirá de nada, pero no te preocupes,
Jasmine no buscará venganza contra tu familia y, por la ayuda que una vez me
brindaste al ponerme en contacto con la Nube Congelada Asgard, este reino
estará bajo mi protección —aseguró Xión.
—Eso es bueno —dijo Xia Qingyue, mirándolo de arriba abajo. Xión
tuvo que admitir que se sentía algo intimidado—. Pero prefiero tener el poder
para proteger las cosas que amo, y sé que tú no me lo negarás, así que mi
decisión es que quiero estar a tu lado.
»Si es lo que quieres, tal vez algún día pueda amarte. Me
esforzaré lo más que pueda, aunque realmente me cuesta valorar a las personas
que no sean mi madre y mi hermano —dijo Xia Qingyue. "Mentirosa, siempre
intimidas a tu hermano. El tipo creció sin ningún valor debido al trauma",
reprendió Xión en su mente—. Pero me esforzaré —prometió—. Puede que no estés
de acuerdo con esto, pero deberías verlo desde este punto de vista:
»Si estoy a tu lado, sin duda te consultaré mis acciones.
Puede que ignore tus opiniones, pero siempre estaré de tu lado —amenazó Xia
Qingyue con descaro. Xión, que ya la conocía, hizo una mueca. Su madre, que no
sabía qué clase de engendro había tenido, la miró con los ojos muy abiertos.
Xión guardó el contrato de matrimonio y Xia Qingyue lo
abrazó.
—Tengo cosas que hacer, volveré luego para hacer las
presentaciones —dijo Xión. Tenía un plan para proteger al emperador de la luna
de la ira de Jasmine, y si tenía éxito, al menos el odio asesino de Jasmine
podría reducirse a tolerancia. Xia Qingyue miró hacia arriba y, fingiendo
sumisión, asintió obedientemente. Luego flotó y lo besó en la boca.
Xión tuvo el repentino impulso de pellizcarle una nalga a Xia
Qingyue por descarada, pero no sabía si, al ser un dios de la creación, estaba
fuera del alcance del poder del Corazón de Jade Esmaltado o si el karma de este
mundo vendría por él. Xión decidió que era mejor no arriesgarse, ya que tenía
muchas cosas que hacer y estas requerían suerte. Por lo tanto, apartó
cuidadosamente a Xia Qingyue y continuó su camino.
Xión se encontraba cerca del Reino del Principio Absoluto. En
el centro de este reino había algunos pequeños reinos donde residían dioses,
así como pequeños fragmentos de realidad que aún conservaban algo de equilibrio
y donde algunos dioses antiguos se refugiaron. Xión también tenía planes para
reparar esto, pero sería más adelante. Ahora tenía algo que probar.
Xión activó el Camino Exterior del Rinnegan y convocó el alma
de la anciana a la que Mu Xuanyin asesinó para probar su poder. Xión estaba
aprensivo, ya que esta era la primera vez que convocaba un alma en este mundo.
Sin embargo, al extender la mano, el alma de la anciana acudió a él y Xión creó
un cuerpo joven para ella en el rango divino maestro.
—Mi esposa no se disculpará, pero me gustaría hacerlo en su
lugar y ofrecerte este cuerpo y tu cultivación como compensación —dijo Xión. La
mujer se observó a sí misma, luego a él, y luego se postró.
—Mi dios, guardaré este favor en mi corazón —dijo la mujer.
—Ve con los tuyos entonces —dijo Xión, y la mujer se levantó,
rompió el espacio y voló lejos.
La prueba fue exitosa, por lo que Xión suspiró de alivio y
convocó al siguiente alma. Al hacerlo, Xión sintió algo emergiendo de él y
dejándolo, mientras el alma convocada cargaba con esa carga. El alma pura se
vio abrumada, pero Xión no iba a hacer nada para ayudarla, ya que este era el
peso de sus propios pecados después de haber asesinado a millones de personas.
Esta era el alma de Yun Che, y al traerla a este mundo, las almas a las que
había agraviado se separaron de él, ya que aún mantenía un vínculo con este
individuo y migraron hacia él.
Xión creó un cuerpo para Yun Che. Era un cuerpo puro e
inmaculado, con sus talentos al máximo y su cultivación en el reino soberano
divino. Sus venas profundas también estaban reparadas y su línea de sangre
activa. Tenía dieciséis años de edad, pero Xión le otorgó algunos conocimientos
adicionales, como el hecho de que salvó a Su Linger y a su maestro, junto con
los recuerdos de su familia.
—¡Has tomado a mi esposa! —dijo Yun Che con ira y odio. Xión
se carcajeó y abrió un portal.
—Detrás de ese portal está tu querida esposa. Si tienes
agallas, ve por ella. Te juro que si te acepta, te entregaré nuestro contrato
de matrimonio, que ya está a tu nombre o tu antiguo nombre, junto con mi
bendición. Además, prometo nunca volver la vista atrás para mirarlos o
interferir en su felicidad. Incluso seré tu padrino de bodas —dijo Xión
señalando el portal con seriedad. Yun Che lo miró perplejo.
—No he tomado a esa mujer, apenas le he dado unas cuantas
nalgadas porque me chantajeó y puso en peligro mi vida. Pero adelante, eres el
protagonista de esta historia. Sin duda, ella te dará su amor al verte.
Seguramente caerá rendida a tus pies —dijo Xión, arrojándole el contrato de
matrimonio a la cara—. Ahora deja de lamentarte y ve —animó Xión. Yun Che
frunció el ceño.
El pobre idiota no sabía que en realidad él se había quedado
con todas sus mejores esposas y ahora trataba de aprovechar la oportunidad para
librarse de la que le causaba repelús. Aunque lo más probable es que Xia
Qingyue le corte las pelotas a este idiota y se las envíe a sus familiares,
convirtiéndolo en un eunuco. Pero él tenía fe. Yun Che lo miró con ira y luego
observó el portal. Xión lo observó.
—Ah, te ha abandonado el valor —se burló Xión con desprecio.
Yun Che apretó los dientes. No tenía nada que reclamarle, ya
que Xión le estaba devolviendo a su supuesta esposa. Ahora solo tenía que ir a
recuperarla, pero era evidente que ya no creía que fuera una buena idea. Aun
así, ya había abierto la boca y si retrocedía, su honor se vería afectado.
Además, este tipo tenía problemas para dejar las cosas pasar. Si él supiera que
Xión había tomado su lugar en su destino, ahora mismo serían enemigos mortales.
—¡Iré! —dijo Yun Che y Xión no esperó a que reuniera el valor
para ser descarado. Le hacía lanzó a Xia Qingyue y cerró el portal detrás de
él.
Cuando Xión se deshizo de Yun Che, respiró aliviado, rogando
al cielo por un milagro, y siguió con su próximo objetivo sin darle mayor
importancia. Era posible que Xia Qingyue matara a Yun Che para eliminar
cualquier mancha o excusa legal en su matrimonio, pero eso ya no era asunto
suyo. El odio y las almas que atormentaban a Yun Che se irían con él al otro
mundo. Xión estaba libre de cualquier responsabilidad en su posible muerte.
…
Xión sacó un anillo que había recibido como regalo de bodas
de Jazmine. Este anillo fue un regalo de bodas de Jasmine por parte de su
hermano, Xisu, y Xión lo obtuvo. Solo necesitaba esto para convocar el alma de
Xisu, pero como no quería fallar bajo ninguna circunstancia, activó el anillo y
convocó el remanente del alma de Xisu.
Frente a Xión apareció la figura de un hombre joven y guapo. Xión
no perdió tiempo hablando con él y tocó su remanente de alma para traer su alma
y darle un cuerpo. Elevó su cultivo al reino del dios verdadero y luego apartó
la mano.
—Necesito revivir a la madre de Jasmine para evitar que su
corazón se llene de odio y pueda ser controlada por la rueda de las mil
tribulaciones. Pero no estoy seguro de poder hacerlo y no quiero causarle
dolor, así que tú serás la conexión que usaré para traer su alma de vuelta
—explicó Xión, quien ya había dejado recuerdos en la cabeza de este individuo
sobre quién era él.
El hombre sonrió aliviado porque sus hermanas estaban bien a
pesar de su estupidez.
—No importa lo que tengas que hacer, puedes proceder —dijo
Xisu con una sonrisa sincera. Xión no perdió tiempo y tocó su cabeza para
infiltrar los bio-nanitos, buscar sus recuerdos y usarlos como conexión entre
él y su madre.
Esta vez, no usaba un remanente y no estaba familiarizado con
el alma, por lo que le costó algunos intentos, pero al final logró convocar el
alma. Xión le dio un cuerpo y ella abrazó a Xisu al verlo, lo que confirmó
definitivamente que no había problemas al convocar almas. Ahora podía
informárselo a sus esposas sin temor a causarles daño.
—Busquen a Jasmine. Debe estar en el reino del monarca
Brahma. No permitan que haga locuras. Tengo a alguien más a quien traer de
vuelta, pero díganle a Caizhi que no me he olvidado de ella, solo que deberé
usarla como conexión para traer de vuelta a su madre —dijo Xión. Xisu hizo una
reverencia.
—Pondré mi vida en ello —aseguró. Xión abrió un portal hacia
donde se encontraba Jasmine y los envió a ambos.
Su siguiente objetivo era más fácil, ya que su conexión con
su alma era la más fuerte de todas. Apenas lo pensó y su alma apareció frente a
él. Xión la tocó y le dio un cuerpo, recuperando su cultivo.
Ni Xuan, apodado el dios maligno, estaba ahora frente a él y
su presencia llamó la atención de Honger y Ni Jie, quienes salieron a su
encuentro. Ellas miraron entre Ni Xuan y él. Xión les dio un pequeño empujón.
—Ustedes siempre serán mis hijas, ahora saluden a su padre
—dijo Xión. Ellas avanzaron tímidamente, pero Ni Xuan las abrazó con fuerza. Xión
sonrió y abrió un portal.
—Vamos por su madre —dijo Xión y cruzó el portal. Ni Xuan se
apresuró detrás de él, llevando a Ni Jie y a Honger.
…
Xión llegó a los límites de este pequeño universo y miró más
allá de su burbuja de realidad. Allí había una energía abrumadora que podía ser
utilizada para ampliar este mundo, pero de momento eso no le interesaba.
Simplemente pisó el espacio y se abrió una distancia de varios cientos de años
luz, revelando a una mujer que utilizaba un artefacto primordial para abrirse
paso en el vacío del cosmos. Detrás de ella, un espacio vacío y luego otro
grupo de dioses que luchaban por mantener las fuerzas aterradoras más allá de
la realidad bajo control.
Al ver que estas fuerzas fueron apartadas y vieron el camino
de salida hacia la burbuja de realidad libre, aullaron con ira y odio,
dispuestos a destruir todo lo que veían, abalanzándose a toda velocidad hacia
la salida, pero todos fueron tragados por el espacio.
—Me encargaré de ellos, ustedes pueden hablar con
tranquilidad —dijo Xión, mientras Jie Yuan, el emperador diablo con el que Ni
Xuan se había casado, se movía al lado de su esposo y lo miraba con
preocupación.
—Tranquila, no les he hecho daño. Solo les daré algo de
tratamiento psiquiátrico para que superen sus traumas —explicó Xión—. Luego
volveré a hablar con ustedes —dijo Xión y abrió un portal, ya que estos
individuos llevaban millones de años sin verse y necesitaban tiempo a solas.
…
Xión se acercó a donde estaba Jasmine, quien lloraba en los
brazos de su hermano y su madre, y al verlo, rompió en ira. Se encontraban en
un palacio, en un pequeño jardín. Caizhi gimoteaba y también lo miraba.
—Xión, ¡eres un idiota! —reprendió Jasmine—. ¿Por qué no me
lo dijiste antes que podías hacer esto? —preguntó con ira mientras le daba
pequeños golpes en el pecho. Xión la abrazó.
—No estaba seguro de que mis habilidades funcionaran en este
mundo —dijo Xión y la abrazó. Luego se acercó a Caizhi y le tendió la mano—.
Tranquila, funcionará —aseguró Xión. Caizhi extendió una mano temblorosa. Xión
la tomó, pero no buscó una conexión en sus recuerdos, ya que Caizhi misma era
la conexión con su madre. Al intentarlo, el alma de su madre apareció ante él,
así que Xión le dio un cuerpo y Caizhi finalmente se reunió con su madre.
Xión observó su reencuentro con una sonrisa, mientras
ignoraba la mirada de una mujer de cabello dorado atada y amordazada. Sin duda,
era Qianye Ying'er y era evidente que Xión había llegado algo tarde, ya que
Jasmine ya había irrumpido en el reino del monarca Brahma.
Xisu lo miraba con aprensión. Él era un Sim y sin duda
pediría clemencia para Qianye Ying'er. Pero Xión no movería un dedo por ella y
la ignoró por completo.
…
Después de varias horas, Jasmine y Caizhi habían recuperado
el control de sus emociones y ahora estaban sentadas a su lado, mirando
fríamente a su prisionera.
—Ignoraré a ese viejo siempre y cuando no se me acerque. No
habrá consecuencias. Pero esta mujer ha actuado con malicia y no la dejaré ir
—sentenció Jasmine.
El emperador de la luna tenía una pequeña excusa para
secuestrar a la madre de Jasmine, Qianye Ying'er, había actuado con desprecio e
intenciones manipuladoras desde el principio, y Jasmine no lo pasaría por alto.
Xión asintió y el alma de Xisu cayó al suelo. Jasmine lució un poco
sorprendida, al igual que Qianye Ying'er, que hasta ahora parecía muy segura de
sí misma. Jasmine parpadeó y luego miró malévolamente a Qianye Ying'er.
—¡A partir de hoy, ella será tu esclava! —sentenció Jasmine. Xión
negó con la cabeza con la misma firmeza de antes. Ya había aceptado a una
persona despreciable a su lado, no había forma de que aceptara otra y se
quedara quieto. Xión miró a Xisu y, sin dudarlo, la señaló con el dedo.
—Hermano Xisu, esta es tu responsabilidad. Sé un hombre y
afronta las consecuencias —reprendió Xión. Xisu pareció conmocionado, pero Xión
tenía razón. Fue él quien cayó en una trampa de azúcar—. Ah, y hablando de eso,
quiero lo que ella consiguió en el reino del principio absoluto. Lo usaré para
avanzar más allá del dios ancestral —dijo Xión.
—Hermana, esto no es una buena idea. El hermano mayor ya fue
víctima de los engaños de esta mujer —dijo Caizhi.
—Así que me desecharán como si fuera una cosa de usar y
desechar —dijo Qianye Ying'er con desprecio. Ella lo miró a los ojos, pero Xión
sonrió. Jasmine se rio y Caizhi carcajeó. Qianye Ying'er las miró sin
comprender.
—Xión puede ver tus verdaderos sentimientos —dijo Caizhi con
malicia. Qianye Ying'er la miró aturdida.
—Sí, puedo ver que todas las personas frente a ti son solo
herramientas a tus ojos. No sientes ningún remordimiento y crees que todos
están por debajo de ti. Además, eres cruel, despiadada, una basura de persona
—dijo Xión y creó una píldora negra, enviándola flotando hacia Xisu—. Tómala y
podrás sentir lo que ella siente —dijo Xión.
Xisu lo miró con dudas, pero Jasmine y Caizhi lo miraron con
frialdad, lo que fue suficiente para que él se tragara la píldora y luego
mirara a Qianye Ying'er. Antes, al verla, él la miraba con nerviosismo y
parecía muy preocupado por el destino de un ángel de bondad, pero ahora pareció
ver a un montón de basura putrefacta.
—He sido un idiota —dijo Xisu amargamente—. No aceptaré estar
a tu lado —dijo con repulsión. A quienes solo les afectaba la belleza de Qianye
Ying'er, podía impresionarles, pero para Xión, que podía ver sus sentimientos y
sentir su ambición desmedida, ella solo le provocaba repulsión. Qianye Ying'er
apretó los dientes y se sintió humillada.
—Deja lo que Xión te ha pedido y puedes irte —dijo Jasmine
con desprecio.
Qianye Ying'er intentó hablar, pero Xión no la dejó y la
sometió a un genjutsu. Ella se levantó, metió la mano a un lado atravesando el
espacio y sacó una tabla de piedra para entregársela a él. Esta era la primera
parte de la técnica de cultivo dejada por la diosa ancestral. Una de estas
partes estaba en manos de esta mujer, otra en manos del emperador diablo y otra
en la Estrella Polar Azul. Xión ya había obtenido la de la Estrella Polar,
recogida por uno de sus clones, y solo esperaba obtener la del emperador
diablo, aunque aún le faltaban algunas cosas por hacer.
Después de que Qianye fuera expulsada del Reino Estrella, que
ahora pertenecía a Jasmine tras arrebatarlo a su padre por la fuerza, Xión
viajó al Reino de la Canción de Nieve, donde se encontró con Mu Binyun. Al
contarle sobre el Camino Exterior, ella decidió traer de vuelta a su padre. Xión
continuó con Huan Caiyi, quien eligió traer de vuelta a su hermano y a su
padre.
Por último, Xión trajo de vuelta a las cuatro Bestias
Divinas: el Dios Dragón, el Fénix, el Fénix de Hielo y el Cuervo Dorado. Hacer
todo esto le tomó una semana, por lo que regresó con el Dios Maligno para
pedirle a su esposa la última parte de la técnica de cultivo de la Diosa
Ancestral. Con ellas en mano, Xión regresó a la Estrella Polar Azul, al Templo
del Monarca Absoluto, para encontrarse con Xiao Lingxi.
…
Xiao Lingxi estaba cuidando de Yun Che en un ala médica,
mientras él era tratado por Yun Gun y Su Linger. Xión no necesitaba preguntar
qué lo había dejado en ese estado o cómo había llegado allí; solo le sorprendía
que siguiera con vida.
Cuando Xión llegó, Yun Che gruñó, pero no podía hacer nada
debido a sus heridas.
—¡Xión! —gruñó Yun Che, aunque su voz era resignada, parecía
que había dejado atrás sus intenciones con Xia Qingyue. Xión hizo una mueca,
pero de todas formas no tenía muchas esperanzas en este tonto, ya que en la
historia original fue manipulado por Xia Qingyue hasta el final.
—¡Eres una desgracia! —reprendió Xión sacudiendo la cabeza
con pesar.
—¿Xión? —preguntó Xiao Lingxi con un parpadeo, mientras lo
miraba. Luego enrojeció.
Xión le dedicó una sonrisa maliciosa para confirmarle sus
pensamientos. Yun Che entendió que él no estaba allí por él, pero en ese
momento otra persona entró a la sala: Xiao Lie. Xión no olvidaba a este
anciano, así que se acercó para tocar su hombro y convocar dos almas, una de
ellas su esposa, y la otra su hijo. Xión les dio cuerpos y Xiao Lie lloró de
felicidad al verlos y confirmar que no eran ilusiones. Xión se apartó y, con un
toque, curó al inútil de Yun Che.
…
Xiao Lie organizó una fiesta, para celebrar el regreso de su
hijo y su esposa, y Xión se quedo, porque era el invitado especial. Luego a
media noche, tomó a Xiao Lingxi, a quien tuvo que amasar para que se dejara
arrastrar en silencio, hasta la terraza del edificio.
Después de ser amasada, Xiao Lingxi estaba temblorosa,
cansada, y muy sumisa.
—Yo… yo amo al pequeño Che, tú… tú… desvergonzado, te hiciste
pasar por él —dijo con voz temblorosa, estando sobre sus piernas y sin ninguna
intención de resistirse.
—¿Xiao Lingxi, quieres casarte conmigo? —preguntó Xión.
—Sí —dijo Xiao Lingxi en un susurro. Xión asintió y entró en
su mente. Ahora estaban en el vacío del espacio.
—¡Cómo te atreves! —reprendió una voz con indignación. Luego,
una chica con apariencia de Xiao Lingxi pero con el cabello dorado estaba en
sus brazos, mirándolo escandalizada. Esta mujer era la diosa norteña, una
antigua diosa ancestral que gustaba del incesto y vivía oculta en la conciencia
de Xiao Lingxi.
Xión la persuadió mientras la diosa gritaba escandalizada,
acusándolo de ser un sinvergüenza. Pero en realidad, ella no se estaba
resistiendo, solo hacía algunos gestos simbólicos y siempre colocaba su cuerpo
en la mejor posición para ser persuadida. En verdad, era una pervertida.
…
Tres horas después, Xión había logrado que la diosa norteña
ascendiera a diosa primordial y ella descansaba en su regazo, estirando el
cuello mientras él la acariciaba con suavidad. Sus conciencias ahora eran una
sola, su cabello era largo y dorado y sus ojos azules.
—Necesito que avances a diosa ancestral —dijo Xión en su
oído.
—Déjame en paz, degenerado —gruñó la diosa. Eso significaba
que ella todavía no estaba satisfecha, por lo que Xión continuó persuadiéndola.
…
—Lo haré —dijo la diosa con voz temblorosa al llegar el
amanecer. Xión asintió y después de un rato, bajó para que Xiao Lingxi
comunicara a su padre que se casaría con él.
Yun Che lo miró con ira e intentó hablar con Xiao Lingxi
acerca de sus sentimientos, pero Xiao Lingxi lo abofeteó, lo llamó degenerado y
caminó con el cuello estirado. Cualquiera daría crédito a su teatro, pero Xión
podía sentir sus emociones, y si no fuera porque ella consideraba inapropiado
estar con dos hombres, ya se estaría dejando persuadir por Yun Che. Yun Che
solo pudo suspirar, pero al menos, ya tenía el camino despejado para avanzar.